Ni bien concluyó la actividad deportiva en el circuito "Segundo Taraborelli" del Moto Club Tres Arroyos los medios de prensa fueron en busca del ganador -primerizo- Emiliano Juez. Y hasta el protagonista en cuestión se sintió sorprendido porque había que esperar turno para hablar con el vencedor del 5to. capítulo de la Monomarca 1100.
"El domingo se presentó lluvioso y todo lo que nos propusimos salió bien. Nunca había corrido con lluvia, pero el auto se comportó muy bien, me permitió cometer errores que no los pagué caro por el buen rendimiento que demostró tener", dijo al principio.
Para el pibe de 17 años y 8 carreras en la Monomarca 1100 todo lo vivido resultó único e inevitable: primera pole position, vencedor en la serie, prefinal y luego, lo más esperado, las 20 vueltas de la final. "Había quedado primero en los ensayos pero lo tomé como una casualidad. Repetí la actuación en la clasificación y ahí sí ya no era casaulidad. Pensé 'hoy no se me escapa´", aclaró entre risas.
La alegría del sabor de la primera victoria no sólo era evidente en el piloto, sino en todo su grupo. "Mi papá (Carlos), mi mamá y Pedro (Goyeneche) -motorista- están felices e ilusionados con lo que puede venir. La verdad este gran momento se lo debo a mis padres porque como tengo 17 años y debuté con 16, ellos me autorizaron", declaró.
Ahora tiene otros objetivos por delante: "mi próximo paso es continuar con la buena cosecha de puntos. Venía sexto en el campeonato y ahora debo haber mejorado. De ahora en más me gustaría terminar el campeonato con el menor número posible", cerró.
